La importancia de la iluminación
Una de las cosas más importantes en el diseño de interiores es la iluminación; después de todo, ¿de qué sirve un buen diseño si no se puede ver? El objetivo de la iluminación de interiores es contribuir al estado de ánimo general de una habitación, hacer más acogedor el espacio interior y crear un ambiente agradable.
Pero la iluminación también tiene muchas finalidades prácticas: hay distintos tipos de iluminación artificial que sirven para iluminar, mientras que otros se destinan a fines especiales, como proporcionar una iluminación indirecta o proteger de la radiación UV. La iluminación también funciona bien como elemento decorativo, por lo que la iluminación es uno de los elementos clásicos del diseño de interiores empleado por los diseñadores profesionales.
Hay varios tipos de iluminación entre los que elegir, y cada uno de ellos funciona mejor en determinados lugares y para determinados usos. En esta entrada, repasaremos los aspectos básicos que debe tener en cuenta a la hora de elegir las luces para su hogar.
Una de sus funciones principales es para resaltar los objetos de un espacio. El color, la cantidad de luz y la dirección de la iluminación pueden utilizarse para crear un estado de ánimo, crear un ambiente o destacar ciertas características de una habitación. La luz atrae la atención hacia lo que queremos que dirija nuestra mirada, por lo que es importante que, al elegir la iluminación de su casa, elija accesorios que muestren su estilo y su gusto, resaltando las cosas que quiere que se destaquen sin que sean excesivamente brillantes o evidentes.
La iluminación es uno de los aspectos más importantes del diseño de interiores. Puede cambiar la percepción de una habitación y hacerla parecer más o menos acogedora, formal, agradable. Puede influir en la sensación de calidez o frialdad de un espacio, ya que afecta a la temperatura de las superficies, como las paredes y el suelo, y a la intensidad de la luz, que desprende calor de las propias bombillas.
Si la intensidad de las luces es demasiado alta, pueden desprender demasiado calor y hacer que la gente se sienta incómoda, así que, si es posible, intenta equilibrarlo con bombillas de menor potencia.
También se utiliza para crear diferentes ambientes en un espacio. La iluminación también puede utilizarse como parte de un esquema de diseño más amplio, como crear una sensación de calidez, frescura o intimidad.
La iluminación general de una habitación puede ser brillante y orientada a las tareas, o suave y relajante. La iluminación general se utiliza para iluminar uniformemente una habitación y permitir que las personas vean lo que están haciendo.
La iluminación puntual se utiliza para concentrar una luz intensa en elementos específicos del diseño de interiores. Puede utilizarse para resaltar un objeto concreto, crear un efecto dramático o crear una atmósfera suave y romántica.
La iluminación de trabajo proporciona una luz concentrada para actividades como la lectura y la preparación de alimentos. La iluminación de trabajo puede utilizarse para iluminar áreas específicas de una habitación, o puede proporcionar una iluminación concentrada en un elemento o área específica.
En resumen, es necesario evaluar adecuadamente las ventajas de utilizar la iluminación artificial en el diseño de nuestros hogares. Si la iluminación de la habitación tiene un efecto relajante y cuidadoso, debe utilizarse para crear confort en el hogar; sin embargo, si es “demasiado” o si es demasiado fuerte, hay que tener cuidado al elegir la lámpara y, sobre todo, su temperatura de color de la luz.
No cabe duda de que la iluminación artificial tiene todo el poder para seducirnos, modelar nuestro estado de ánimo y ayudarnos a elegir nuestro atuendo para el día. Sin embargo, también hay desventajas que todo el mundo debería conocer: la iluminación artificial puede afectar a nuestros ciclos de sueño, lo que puede tener un impacto negativo en nuestra salud e incluso provocar dolencias.